2012/09/08

Likátsin




Likátsin. La revista

Por Luis Gerardo Martínez García

Recomendable el número más reciente de la revista Likátsin. Publicación especializada en educación con una trayectoria plenamente identificada por su alta calidad editorial, diseño y textos. Caracterizada por ser una revista sobreviviente, vuelve a aparecer en una nueva época, financiada por la Dirección de Educación Normal de Veracruz.

En sus años iniciales, Likátsin fue fuente de consulta para aquellos lectores y escritores interesados por el discurso educativo de frontera, publicando textos comprometidos con divulgar y difundir la situación de la educación en su diversidad de líneas. Con regularidad podíamos leer a destacados investigadores de la república y del estado; muchos de ellos docentes en universidades públicas y líderes de opinión que respaldaban las páginas de esta publicación en cada número.

Ahora que aparece nuevamente la revista, la volvemos a ver muy bien cuidada. Una coordinación, un trabajo editorial y una asesoría técnica que sólo se les conoce a Eva Barrios y Lagunes y Josefina Acosta Avilés; reconocidas por ser las creadoras de dicho proyecto y por conservar por tantos años una publicación de calidad, evidentemente apoyadas por la voluntad política del jefe en turno, por un equipo de diseño gráfico, corrección de estilo, captura y formación. Eva y Josefina han tenido siempre la sensibilidad y el conocimiento para convocar a los escritores de temas educativos que se han dado cita en las columnas de Likátsin; y también han tenido la inteligencia y la visión para atraer a los lectores hacia la revista, teniendo claro que lo publicado debe ser del interés de los maestros.

Después de las revistas que hicieron grandes pedagogos veracruzanos como Enrique C. Rébsamen, Carlos A. Carrillo y Ángel J. Hermida Ruiz, me atrevo a afirmar que Likátsin es la única que ha continuado por años conservando su alta calidad y reconocimiento. Basta revisar algunas tesis profesionales de grado y de posgrado, conocer ciertos reportes de investigaciones de institutos de educación, de visitar bibliotecas normalistas y pedagógicas para darse cuenta que esta revista es un referente de consulta obligada por la riqueza de sus temáticas, apartados, autores y posturas; ellos nos habla de que su equipo directivo siempre busca que la revista sea educativa, de apertura y libertad de pensamiento.

Hoy en día Likátsin es la única revista de educación que se publica en Veracruz. Muchos esfuerzos editoriales han existido en diferentes momentos de la historia contemporánea: la mayoría  publicaciones independientes, contribuyendo al debate, análisis, crítica y propuestas sin mayor compromiso que el social y educativo, de ahí que sólo por sus condiciones económicas han dejado de imprimirse. Por su parte, Likátsin no escapa a los avatares editoriales de una publicación educativa en tiempos de crisis; aún así es la única que ha permanecido vigente.

El número que circula actualmente contiene diez textos en ochenta páginas muy bien cuidadas (la considero de esas revistas de las que siempre se aprende). Textos expresamente escritos para este ejemplar: “Quehacer educativo. Movilizar los aprendizajes: ¿dónde y cuándo se aprende en la formación inicial?, ¿a quién le corresponde?” de Phillipe Perrenoud; “Trayectorias colectivas. Reflexiones sobre el trabajo colegiado docente a partir de una experiencia particular” de Aranzazú Esteva Romo; “También somos. Formación docente desde el contexto de la práctica intensiva” de Cutberto J. Moreno Uscanga; “Quiénes son los estudiantes normalistas de Veracruz” de María del Pilar Ramírez Morales; “Entérate. Escuelas normales y Programas Vasconcelos” de Enrique Gómez Reséndiz; “Te cuento. La conformación nacional de una red de investigadores dentro del Proyecto Internacional de Directores Exitosos (ISSPP). La experiencia en Veracruz” de Magdalena Flores Márquez y María Cristina Lara Bada; “Dejan huella. Francisco Galván Rivera” de Josefina Acosta Avilés; “Educación en cifras. “Evaluación externa de las escuelas normales” de Eva Barrios y Lagunes; y, “Conocer para crecer. La lectura y la escritura: una praxis” de Ana Livia Martínez Martínez.

Esta nueva época de Likátsin, excepto porque se anuncia como publicación anual, promete grandes aportes a la educación de Veracruz. Seguro estoy que aún con los altibajos, esta publicación continuará imprimiéndose, invitando a escritores y lectores a darse cita en ese espacio público configurado por sus páginas llenas de enseñanzas, inquietudes, críticas, aprendizajes y reconocimientos. Likátsin, una revista recomendable que sigue esperando el magisterio veracruzano en sus aulas y bibliotecas.